La realidad de las personas mayores

A simple vista, darle un “cuerpo” a la desinformación y a las noticias falsas, explicar qué son, puede sonar como un ejercicio innecesario u obvio, pero al consultárselo a personas mayores, las definiciones pueden variar y ser diversas.

Viviana Aguilera Belmonte es una profesora jubilada de 67 años, vecina de Concepción, que opinó que las “noticias falsas son las que se evidencian como tales, aunque muchas veces los usuarios de Facebook o de redes sociales, creemos en ellas”.

Crédito fotografía: Paola Obreque.

Norma Cáceres Sanhueza, también profesora jubilada, de 75 años, de la capital de la Región del Biobío, comentó que “son noticias que uno lee y que están tan bien fundamentadas, con tanto argumento, que aparentan ser verdaderas… pero al final son falsas totales”.

Crédito fotografía: Paola Obreque.

Las noticias falsas pueden ser fabricadas con la intención de engañar e informar a través de la manipulación. La Federación Internacional de Periodistas, a través de su “Guía para combatir la desinformación en la era de posverdad” conceptualiza que las noticias falsas o fake news provocan un peligroso círculo de desinformación, ya que con el uso de las redes sociales, los usuarios no solo son consumidores de contenidos engañosos, sino también productores. Donde el riesgo se encuentra en el concepto “era de posverdad”, el cual hace referencia  a que la objetividad de los hechos pierde importancia, e incluso validez, a la hora de modelar la opinión pública apelando a las creencias personales y las emociones, vulnerando derechos fundamentales, como el derecho a la información y a la participación política. Motivo por el cual la Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas (ONU), en 2021, solicitó a su secretario general presentar un informe para contrarrestar la desinformación y proteger los derechos humanos vulnerados.

Ricardo Muñoz Sáez, de 65 años, es viñamarino y trabaja como conserje desde hace más de 30 años. Votó por primera vez para el plebiscito de salida del primer proceso constituyente, periodo en el que recuerda era muy común que entre las personas se preguntaran la opinión. Su motivación fue la supuesta posibilidad de un aborto libre y de realizarlo días y hasta horas antes del nacimiento, creyendo que de haberse aprobado esa constitución, se habría generado conflictos y un descontento social importante, sin identificar que aquello, fue una de las tantas noticias falsas que surgieron en aquel proceso.

En las redes sociales no me meto mucho, porque se dicen cosas que no son verdad y uno hace comentarios de algo de lo que, en realidad, no hay claridad. No me meto”.

Ricardo Muñoz Sáez, Viña del Mar.

Crédito fotografía: Francisco Bartholin.

Si bien reconoce los riesgos de las redes sociales en cuanto a la desinformación y la posibilidad de caer en noticias falsas, indica no recordar alguna en específico que haya leído, a pesar de confirmar consumir noticias a través de redes sociales y otras plataformas. Finalmente, menciona que una de las maneras que utiliza para confirmar informaciones o noticias, es preguntándole a personas que son de su confianza. Aun así, no tiene consciencia de que las noticias falsas o desinformación puedan afectar de alguna manera a él o a su familia.

Verónica Aciares Hernández, de 74 años, es dueña de casa, zumbera y antofagastina. Considera que la desinformación afecta considerablemente la confianza y credibilidad, señalando que ella ha sido víctima de ella en Facebook. Si bien intenta no caer consultando a quienes considera más entendidos en la materia, en más de una ocasión ha sido perjudicada por la viralización de estas.

“Una vez, si mal no recuerdo, leí que había muerto cierta persona, que después la vi… entonces yo dije, ¡pero cómo la están matando si yo la estoy viendo viva!”.

Verónica Aciares Hernández, 74 años, Antofagasta.

Crédito fotografía: Daniela Canto.

Fotografía cedida por M. Echegoyen.

Para Maximiliano Echegoyen, periodista y ex verificador de hechos del medio de comunicación Fast Checking, los procesos donde se requiere censar o realizar plebiscitos son escenarios que se ven afectados y sufren de desinformación, lo que provoca contaminación informativa. 

Por su parte, Luisa López manifestó su preocupación, tanto por la divulgación de noticias falsas y desinformación en sí, como también por la forma en que afectan a la ciudadanía en Chile, especialmente a las personas mayores, ya que, opina, faltan espacios seguros y herramientas concretas para poder enfrentarlas. Es firme al señalar que dentro de los mecanismos que utiliza para no caer en fakes news hay que ser capaz de buscar otras opciones y no quedarse solo con un tipo de información. Aconsejó leer, buscar en Google sitios seguros, preguntar y escuchar otras opiniones, siendo la responsabilidad de uno averiguar la verdad.

Acciones que Alma Palacios, profesora de la Escuela de Periodismo de la Facultad de Comunicaciones de la Pontificia Universidad Católica de Chile y editora de factchecking.cl, recomienda como estrategias esenciales para evitar que las personas mayores caigan en desinformación a través de redes sociales.

La experta señala que frente a cualquier sentimiento de desconfianza lo importante es buscar dicha información, utilizar buscadores como Google para confirmar que esa información es abordada en sitios web confiables, como los de medios de comunicaciones formales. Agregó que también es importante nuestra responsabilidad frente a la confianza de otras personas cercanas, evitando replicar información que no tenemos seguridad en su veracidad.

Fotografía cedida por A. Palacios.

Por otro lado, José Padilla (68 años), jubilado recientemente y oriundo de Antofagasta, indica que la desinformación que giraba en torno a la aprobación de una nueva constitución el 2022 afectó la coexistencia en su entorno familiar, señalando que se generaron conversaciones que finalizaban en discusiones, ya que sus hijos mantenían un discurso contrario frente a la posible aprobación de una nueva Carta Magna.

Para qué vamos a votar apruebo si vamos a quedar peor de lo que estamos, decían ellos”, indica José Padilla sobre la manifestación de sus hijos.

Crédito fotografía: Daniela Canto.

De igual forma, José Padilla recalca que con el tiempo su núcleo familiar finalmente había comprendido, indicando que él tenía la razón y que el camino correcto a su parecer, era aprobar la nueva propuesta.